jueves, 2 de julio de 2009

VIA DE LA PLATA EN BICICLETA DE MONTAÑA




Puente de MÉRIDA. Inicio de nuestra ruta.












ASTORGA, capital de la Maragateria.
Fachada del Ayuntamiento con los Maragatos dando la hora.
Final de nuestro recorrido.



















Este año teniamos previsto hacer una ruta en bici por el Danubio la 1ª semana de junio aprovechando que el día 1 en BCN es festivo y, de esa manera, gastar los menos días posibles de vaciones. El amigo Jaume, por compromisos laborales, no pudo disponer de esos días y, por ello, decidimos cambiar de destino y dejar la ruta centro europea para el año que viene en el que Jaume, organizador de esa escapada, podrá acudir con toda seguridad.

Así que nos quedamos sólos Pepe y yo,Clemente, con ganas de pedalear pero sin ruta organizada.
Como hacia un par de años y despues de hacer el Camino de Santiago, adquirí una guia de la Vía de la Plata (Camino Mozárabe de Santiago), retomé el tema y se lo propuese a Pepe: podiamos intentar llegar desde Mérida a Astorga.

Despues de meditar, consultar, hablar con otros cicloturistas que semanas antes habian hecho el camino y de documentarnos todo lo posible, decidimos que podiamos intentarlo y pensamos que sería una muy buena idea hacerlo en 7 jornadas.

Reservamos billete de autobus en la empresa Suroeste para el viernes 29 de Mayo de Barcelona a Mérida (habiendo enviado previamente las bicis por paqueteria porque la citada empresa no considera equipaje a las bicicletas) y otro de vuelta para el 6 de Junio, sábado, en la empresa ALSA de Astorga a Barcelona (en esta empresa no hay problema en llevar la bici el mismo día aunque hay que efectuar un pago suplementario).

Solventado el tema de transporte, estuvimos toda la semana inquietos y organizando las cuatro cosas que debiamos llevar en las alforjas de viaje: ropa, repuestos y herramientas. El 29 de Mayo, viernes, a las 5,30 de la tarde salimos de la Estació del Nord de Barcelona con destino Mérida donde llegamos a las 7.00 horas de la manñas del 30 de Mayo, sábado algo cansados tras 14 horas de autobús pero enormemente ilusionados en poder hacer la ruta planeada.

DIA 30 de Mayo. MERIDA – CACERES. 78.55 km en total.

Mérida.


Antes de llegar a El Carrascalejo, pasando por las bellas llanuras del Parque Natural de Cornalvo.










Encinas, calor y....problemas con la señalización.






Casas de Don Antonio. Puente medieval, de origen romano, sobre el río Ayuela.





Cruz de San Juan antes de llegar a Alcuéscar.







Puente romano y miliario.











Miliario antes de Valdesalor.













Cáceres. Pza Mayor.












A las 7 de la mañana entraba el autocar en la estación de Mérida .
Fuimos a recoger las biciletas a la paqueteria donde comprobamos que todo estaba en orden y que las mismas no habían sufrido daño alguno. Después de cambiarnos, almorzar un poco y acondiconar las alforjas, iniciamos la salida a las 8 de la mañana. Hacia una temperatura agradable que invitaba a ir en bici. En las calles practicamente no se veia a nadie a esas horas del sábado.
Fácilmente tomamos la salida y, por carretera local, llegamos a la presa romana de Proserpina ¡sorprende que esos muros de más de 2000 años estén todavía a pleno rendimiento!. Siguiendo por la misma carretara, unos 4 km más adelante tomamos, en un desvio a la izquierda, la psita de tierra. Nada más entrar tuvimos el primer susto ya que, sin poder apreciarlo con tiempo, nos encontramos con un terreno totalemten arenoso lo que propiciaba que la rueda delantera se “clavara” con el consiguiente peligro de caida. La pista arenosa se fue alternando, practicamente, hasta la finalización de la etapa. Entre dehesas de alcornocales y grandes piaras de cerdos llegamos a El Carrascalejo donde nos aprovisionamos de agua. Seguimos hasta Aljucén, desde donde nos esperaba un largo tramo (casi 22 km) complicado por el calor y por la ausencia de población hasta llegar a Alcuescar . Esta pista al poco se convierte en una senda/vereda algo técnica por las malas condiciones del terreno y con dificultades en seguir las marcas que estaban en los árboles y en ocasiones era fácil perderlas. A unos 10 km de Aljucén dejamos la provincia de Badajoz y entramos en Cáceres. Poco a poco el calor arreciaba en la misma proporción que la fuerte subida a Alcuéscar; afortunadamente las pista, aunque con pendiente, resultaba fácil por su buen estado.
A unos 4 km de Alcuéscar está la Cruz de San Juan, uno de los cruceros más atractivos de la vía aunque, desgraciadamente, por las obras de mejora de la pista, parece que ha quedado algo desubicado.
Después de la comida en Alcuéscar y de la charla con los parroquianos del bar, nos dirigimos a Casas de Don Antonio y Aldea del Cano en un ligero descenso pero que permitia soportar mejor el terrible calor que empezaba a castigarnos. En este tramo vimos los primeros Miliarios - .
Dede Aldea del Cano, donde nos refrescamos en el hogar del pensionista, seguimos por carretera hasta Valdesalor, pueblo nuevo de colonización agraria, para intentar ganar tiempo. En Valdesalor retomamos otra vez la pista hasta el inicio del Puerto de la Camelias, que lo hicimos por carretera, ya que a esas alturas y despues de una noche sin dormir y con los 78 km a cuestas a 36 o 38º de calor, realmente habia ganas de llegar a Cáceres donde, tras la reparadora ducha y el correspondiente descanso, salimos a vistar la ciudad y a cenar en la Plaza Mayor.

lunes, 29 de junio de 2009

DIA 31 de Mayo. CACERES - GALISTEO. 78.20 km en total.

Vista de Casar de Cáceres.


Miliarios en la ruta.







Embalse de Alcántara.











Veredas después de Grimaldo.













Embalse de Riolobos.




Entrada a Galisteo











Murallas y Puerta del Rey.










Piricutin











Cáceres estaba de Feria y a las 8 de la mañana, cuando saliamos, la juventud regresaba a casa. Por la Feria y por el hecho de ser domingo, no encontramos nada abierto. El desayuno fué en Casar de Cáceres , a 11 km distancia que recorrimos rápidamente sobre todo por el agradable frescor matinal. Entramos en el único bar abierto y su dueña nos convenció, cómo no, para que tomaramos una tostada con la famosa Torta del Casar. Mientras almorzabamos, la gente que poco a poco entraba en el bar, nos iba dando instrucciones de cómo seguir y de, sobre todo, no olvidar aprovisionarnos de agua ya que el tramo que nos espera hasta Cañaveral, próxima población que encontraremos por la ruta, está a 34 km. Un burgales casado con una cacereña de Casar avisó que “hoy será mucho más caluroso que ayer”. Cuando le pregunto qué es lo que hace un burgales en Cácers, contesta guasón: pasar calor. No se equivocó. El día fue terrible con temperaturoas de hasta 40º.
Salimos de Casar por la prolongación de su calle Mayor y, en seguida, tomamos una excelente pista de tierra en la que se hizo fácil rodar los primeros km. Pasamos por un grupo de miliarios y al poco, después de atravesar varias fincas, vimos a lo lejos la confluencia del Río Almonte y del Río Tajo en el embalse de Alcántara. Para cruzar ambos ríos es preciso acceder a la N630 hasta el Hostal que hay despues de pasar la Torre Floripes, que emerge integramente de las aguas del Embalse de Alcantara . En el Hostal, regentado por un simpático holandes que insiste en asegurar que este es el mejor lugar en el que puede estar, tomamos un bocadillo, nos aprovisionamos de agua y descansamos un poco. Enfrente del Hostal y cruzando la carretera aparece de nuevo la pista en fuerte subida y con un firme muy malo que seguirá así hasta Cañaveral a la que faltan aún unos 10 km.
No entramos en Cañanveral por lo que no podemos atrevaser el puente medieval de San Benito (por donde tradicionalmente entraban los peregrinos a la población). El calor arrecia y afrontamos por carretera el ascenso al puerto de los Castaños para llegar a Grimaldo, donde nos paramos a comer en el bar del Albergue. Los paisanos están dejando pasar el calor de mediodia a la sombra de una parra que es donde nos sirven la comida. Enseguida nos inlcuyen en sus charla e, incluso, el amigo Luis nos informa de las pormenoridades del pueblo y nos hace saber, orgulloso, que él es el propietario de la viña más grnade de Grimaldo. Debajo de la parra se está muy bien pero tenemos que seguir. Salimos de Grimaldo por la carretera que lleva a Holguera y a los pocos metros las señales nos envian de nuevo a la Calzada atravesando diversas fincas en las que encontramos ovejas y ganado vacuno en libertad. Hasta Galisteo, lugar donde tenemos previsto dormir, nos quedan casi 20 km de descenso aunque no por ello fácil. Al principio es un ligero descenso por pistas más o menos anchas pero, poco a poco, el descenso es más pronunciado y las pistas se convierten en veredas estrechas entre encinas y rocas y con cantidad de cancelas que delimitan las diferentes fincas, cancelas que hay que atravesar y volver a cerrar lo que rompe constantemente el ritmo. Al finalizar el largo descenso, vemos un recodo del embalse de Riolobos y al poco accedemos a la N630 en la que tenemos que transitar durante sólo 1 km para acceder a nuestra izquierda de nuevo a la Calzada. No vimos las señales y seguimos por carretera ascendiendo un pequeño puerto con rampas algo duras. Seguimos algo más por carretera y al preguntar nos hicieron ver nuestro error teniendo que deshacer el camino hecho por carretera. Este error supuso unos 7 km más de ruta que despues se notaron en las piernas al final del día. La entrada a Galisteo fue algo caótica ya que las señales no estaban muy bien pero, al fin y despues de un par de repechos serios, entramos a la población. Despues de cenar y con la fresca nos decidimos a conocer las murallas, “La Picota” o torre y la Iglesia. Entramos en alegre conversación con el amigo Vicente y su mujer Mª Fé quienes nos acompañan y enseñan las murallas, el Piricutin y la Iglesia y nos explican la lucha que tiene el pueblo para recuperar La Picota del actual propietario quién, al parecer, no le presta demasiada atención. Rela y lamentablemente se ve en mal estado. Durante la gira por el pueblo se nos unen Andres, agricultor, y su esposa Florencia quienes nos cuentan multitud de anecdotas locales como la de aquella vez que tuvieron que sacrificar a una vaquilla que, en fiestas, subió a las almenas de las murallas y despues no podia bajar. Fue una velada realmente agradable y que nos hizo olvidar del calor y de las penurias soportadas durante el día.

DIA 1 de Junio. GALISTEO – BAÑOS DE MONTEMAYOR. 68.20 km en total.

Zonas verdes entre Aldehuela del Jerte y Carcaboso.


De Valdeobispo a Venta Quemada




Venta Quemada


































Arco romano de Caparra.






Arco de capera - Arco de Caparra




Descenso hacia Aldeanueva del Camino.









La etapa de ayer fue dura por el calor y acabamos realmente cansados. Esto nos hace modificar un poco nuestro plan de viaje y decidimos acortar la etapa de hoy y acabar en Baños de Montemayor en lugar de La Calzada de Béjar. Por tanto, 13 km menos.
A la salida de Galisteo tenemos de nuevo problemas. Están haciendo obras de acondicionamiento de carreteras y las señales han desaparecido. Despues de un titubeante inicio en el que tomamos diferentes salidas erróneas, acertamos con la carretera local que nos lleva hasta Aldehuela del Jerte y Carcaboso. La ruta es placentera: transitamos entre campos verdes, con la carretera totalmente plana y con el río Jerte a nuestra derecha lo que da frescor al día que también se intuye caluroso.
En Carcaboso la Calzada se desvía a la derecha pero como no es apta para bicilcetas, nos obliga a seguir por la carretera local hasta Valdeobispo y, desde allí, seguir por pista agraria (recientemente asfaltada) hasta Venta Quemada. Al inicio de esta pista nos encontramos con un grupo de jubilados que estaban a la sombra de una encina y con quienes charlamos animadamente un rato. Dicen que no nos tienen envidia porque intuyen que va a hacer mucho calor….prefieren seguir en la sombra. En el inicio hay una fuerte pendiente pero se suaviza poco a poco aunque con tendencia a subir. Llegando a Venta Quemada retomamos la Calzada que ya no dejaremos practicamente en todo el día. Aquí coincidimos con una pareja de belgas que también van en bici y, como nosotros nos paramos a reponer fuerzas, nos adelantan y en seguida los perdemos de vista. El paisaje es espectacular: grandes dehesas con ganado vacuno, corrales o cercados de piedra más pequeños por todas partes y encinas y carrascas por toda la calzada que proporcionan una agradable sombra al caminante o ciclista.
Aquí coinciden Calzada y cañada.
El camino poco a poco se va estrechando por la maleza y atravesando dos fincas por un estrecho camino entre muros de piedra, de pronto y sin aviso previo, vemos el imponente arco romano de Cáparra. Construido a finales del S. I tenía la función propagandistica para conmemorar la grandeza y superioridad de Roma. Es el único arco monumental cuadrifonte (construcción de cuatro pilares situados en los vertices de un cuadrado) que se conserva en España.
Dejando atras el arco de Cáparra y siguiendo la Calzada, nos dirigimos a Aldeanueva del Camino en una bonita y fácil bajada en la que volvemos a atravesar varias cancelas y algunos riachuelos y charcas con poco caudal de agua. A la entrada de Aldeanueva tenemos un pequeño problema para localizar las señales despues de cruzar la N630 y la autovia lo que nos hace perder un poco de tiempo. Comida en un mesón antes de Aldeanueva cuyo dueño nos permite descansar e incluso hacer una reparadora siesta despues de la comida ya que a esas horas hace un calor insoportable. A la salida de Aldeanueva nos encontramos con varios ciclistas de la zona y uno de ellos, natural de Hervás, que empezaba a subir el Puerto de Bejar, nos acompaña una rato explicandonos sus aventuras por estos lugares. Como el iba con bici de carretera, decidimos subir con él hasta Baños por carretera en vez de por la Calzada (que prácticamente va paralela). Ciclista simpáico y avezado pero como nos estaba sacando de punto, le dijimos que no podiamos seguir su ritmo y, poco antes de Baños, nos despedimos agradeciendole su compañía. Esa tarde acabamos pronto y aprovechamos para lavar algún maillot y descansar. En la subida a Baños se me acabó la pila del cuentakilómetros y ya no pude encontrar otra igual en ningún otro punto de la ruta.

viernes, 26 de junio de 2009

DIA 2 de Junio. BAÑOS DE MONTEMAYOR – SAN PEDRO ROZADOS 70 km

Vista de Baños de Montemayor y del embalse ascendiendo al Puerto de Béjar.
Iglesia de Santa Maria de la Asunción en Baños.











Puente romano de la Malena sobre el río Cuerpo del Hombre.






















Calzada de Béjar






Iglesia de Santiago en Valverde de Valdelacasa.

















Ruta de Calzada de Béjar a Valverde de Valdelacasa.

























Ruta de Valdelacasa a Fuenterroble de Salvatierra.




















Iglesia de San Pedro en San Pedro de Rozados.







A primera hora y con ambiente fresco iniciamos la subida a Puerto de Béjar. Lo hicimos por carretera, por consejo del amigo ciclista de Hervás, ya que aunque es algo amàs largo, resulta más cómodo que por la Calzada que aquí es de piedra y, por tanto, fatigoso de hacerlo en bicilceta. Entramos en la provincia de Salamanca y al poco ya estabamos en Puerto de Béjar. Desde aquí retomamos la Calzada y en un agradable descenso vamos en busca del río Cuerpo del Hombre que cruzamos por el puente romano de la Magdalena, popularmente llamado La Malena. Cerca del puento hay otro miliario. Desde aquí a la Calzada de Bejar hay una brusca y fuerte subida. Almorzamos en el albergue Soraya (cuaya propietaria se queja de que su albergue no sale en las guias y que ya no sabe qué hacer para que conste y asi atraer clientes) y aquí coincidimos cun un grupo de tres ciclistas de Guadalajara a los que iremos viendo a partir de ahora en las diferentes etapas. Por una fácil pista alcanzamos Valverde de Valdelacasa. Pero para llegar al siguiente pueblo, Valdelacasa, debemos hacerlo por una carretera local en la que no encontramos ningún coche pero que tiene unos repechos considerables. Empieza a hacer calor pero, afortunadamente, se nota que no “aprieta” tanto como en días anteriores. Retomamos la calzada para llegar a Fuenterroble de Salvatierra donde comemos. La posadera nos recomienda que, para bicilcetas, es màs aconsejable hacer ruta por carretera que son locales en las que no hay circulación y se salva major el Pico de la Dueña que es la úlitma cota que queda en el día de hoy. Le hacemos caso y acertamos a medias. La carretera es, sin duda, mejor que la calzada pero también es cierto que el ascenso al puerto, que hay que hacerlo igual, se hace más duro pues el calor a esa hora ya es fuerte y en todo el ascenso practicamente no hay ninguna sombra. Al cruzar el puerto (de 1108 metros) dejamos a nuestra derecha el Pico de la Dueña y la Cruz de Santiago y retomamos la Calzada. Descansamos unos momentos en la finca Calzadilla de los Mendigos y después de 8 km más, entramos en San Pedro de Rozados donde encontramos un estupendo albergue practicamente recien estrenado y con buenas habitaciones aunque con pésimo servicio de comidas. Visitando el pueblo, charlamos animadamente con uno de sus vecinos quién nos explica las dificultades que tienen porque no ha llovido en toda la primavera y sus cosechas este año han perdido gran parte de su valor.